La enseñanza iniciática
La enseñanza iniciática, que utiliza el método de la Gnosis, se efectúa por medio de símbolos. Al meditar sobre los ellos, el Iniciado discierne, intuye y capta sutiles iluminaciones, adquiere un conocimiento directo, que se oculta en las profundidades de su Ser, alcanzando de ese modo un saber libre de dogmatismos que viene del guía interior o principio director de nuestra vida. El camino, la vía o el método de la Gnosis promueve el conocimiento trascendente haciendo surgir desde los más intimo, el fruto que brota del Corazón del Iniciado, el súbito reflejo intuitivo de la Verdad.
Los tiempos que corren están marcados por el desarrollo vertiginoso de las tecnologías más inverosímiles, por la difuminación de las fronteras y, para muchos, por la preeminencia de la sensualidad, el materialismo, la banalidad y el individualismo como realizaciones absolutas del hombre contemporáneo. Paradójicamente, esta misma realidad de nuestro mundo, que parcialmente es innegable, está acompañada de una dinámica que va en contrasentido y que se ha ido incrementando en los últimos años: la búsqueda de la trascendencia del hombre, la elevación del género humano, la solidaridad como práctica cotidiana y el sentido de corresponsabilidad que tenemos con el planeta son la otra cara de la moneda.
Por eso no nos extraña que haya aumentado sustancialmente la afluencia de voluntades que buscan en la masonería una fuente que nutra estas necesidades y que permita el crecimiento integral del ser humano.
Nuestra logia, fundada en 1823, digna heredera de una tradición que se pierde en la noche de los tiempos, y donde muchos hombres han desarrollado sus virtudes para enaltecer a la humanidad, mantiene vigente su acción en favor de un mundo mejor.
Cada martes en la tarde nuestras puertas se abren para orientar a quien quiera guiar sus pasos por una senda de fraternidad y sabiduría. Semana a semana materializamos en nuestras acciones los aprendizajes que nuestra Orden nos brinda. Ser masones representa un privilegio que se traduce en un compromiso con la vida. El camino por recorrer es largo, pero también es hermoso y gratificante, por ello, los masones de la Logia Fraternidad N° 4 nos esforzamos por ser dignos de quienes nos han precedido y queremos marcar rumbos para quienes nos han de suceder.