LO QUE DEBES SABER SOBRE LA FRANCMASONERÍA
POR ISSA K. MOUSSA DARGAM P :. M :. Gr :. 32º .
PREFACIO
Este folleto se le entrega a Ud. que tocas nuestra puerta solicitando admisión, para que puedas adquirir algunos conocimientos primarios y fundamentales acerca de la institución Francmasónica antes de presentar la solicitud de su ingreso. Es importante la adquisición de estos conocimientos, para que en el futuro no tengas motivos para pensar que fue engañado en su buena fè, puesto que la Masonería no recluta, y Ud. Al firmar la solicitud de su ingreso a nuestra augusta orden, debe hacerlo después de profunda meditación y por su libre y espontánea voluntad.
LOS ORIGINES DE LA ANTIGUA MASONERÍA
Muchos son los escritos que remontan la Masonería a épocas muy antiguas de la historia como la de Adán y Eva en el paraíso del edén, la de los constructores de la torre de babel, la de los caldeos, los persas o el rey Salomón.
Algunos, considerando los aspectos filosóficos, sin descartar los relacionados con la construcción, buscan sus origines en los misterios de Mitra, los egipcios, los griegos, o los romanos. Hay quienes los ubican más adelante en la historia, buscando origines más prestigiosos, atribuyen el nacimiento de la
Masonería a los Cruzados o a los Templarios que se salvaron después del arresto de su gran Maestro Jacques de Molay en el año 1307. Pero ninguna de estas teorías ha sido históricamente comprobada. Ningún documento histórico da evidencia o induce circunstancialmente a encontrar los origines de la Masonería en alguna de las fuentes referidas.
Es lógico que, una sociedad iniciática como la Masonería, tenga algunos puntos comunes y de coincidencia con muchas sociedades similares de todas las épocas, incluso de la antigüedad, es más, de allí a determinar su origen por esto, es perder la seriedad histórica.
EL ORIGEN REAL DE LA MASONERÍA
En diferentes fechas de la historia, existen menciones que hacen sospechar de la existencia de la orden francmasónica, pero la evidencia más sólida sin lugar a duda, es, que el origen real e histórico de la Masonería se ubica en la edad media, cuando, después de la caída del imperio romano, la iglesia católica, interesada en su esplendor, se dedicó a la construcción de abadías, catedrales y templos, y por otro lado, los príncipes y señores feudales, para demostrar su poder, construyeron sus palacios y castillos.
Y para realizar estas obras era preciso e indispensable contar con mano de obra especializada en las áreas de la arquitectura, la construcción y la elaboración de materiales, especialmente la piedra.
Ahora bien, estos verdaderos profesionales de la construcción, al igual que los profesionales y artesanos de otras ocupaciones (joyeros, tejedores, herreros o carpinteros) se agruparon en verdaderas cofradías y corporaciones para la defensa y protección de sus profesiones, estas cofradías (Logias) eran las guildas: asociación de comerciantes extranjeros, para defenderse jurídicamente de los de la localidad. Todos tenían sus respectivas sedes en las ciudades, lugar normal de sus actividades diarias. En cambio para la guilda de los constructores, albañiles o Masones, su sede no era siempre la ciudad, o casi nunca era la ciudad, el lugar de su trabajo estaba generalmente, lejos de la ciudad, en el sitio donde se construían los edificios, castillos y abadías. Es por ello que crearon el concepto de LOGIA, esa gran cabaña o pequeño edificio construido anexo o cerca del lugar de la construcción donde vivían, se reunían, guardaban sus herramientas de trabajo, sus textos y planos y era el sitio donde se enseñaba a los aprendices el arte de la construcción, era una época de gran movilidad requerida de todos los Masones para encontrar y conseguir trabajo, inventaron un sistema de reconocimiento secreto. Estos aprendices eran instruidos en su profesión por expertos maestros y en la medida que demostraban sus conocimientos eran iniciados en ceremonias especiales. Además, en estas Logias era donde, al fin de la jornada de trabajo, recibían de manos de su maestro, su justo salario. Esta época de la Masonería es la que denominamos: Masonería Operativa.
PORQUE FRANC-MASONERIA
Acotaremos algunas de las hipótesis que tratan de explicar este concepto. (Free masonry .
1 – Franc , del francés franche, del ingles free, libre. Justamente la concepción de libre proviene de la gran libertad de movimiento que tenían los Masones para viajar de un lugar a otro ofreciendo sus servicios profesionales.
2 – El concepto de franc, o free se refiere al tipo de piedra. Por un lado, los Masones de la “Piedra Bruta”, que eran de una categoría profesional inferior y, por el otro los Masones de la piedra pulida, de categoría superior. En ingles, “Rough Stone Masons”, los primeros y, “Free Stone Masons” los últimos. Según esta hipótesis, solamente al alcanzar los Rough Stone Masons la categoría profesional de Free Stone Masons podían ser miembros de la corporación con todos los derechos.
EL PASO DE LA MASONERÍA OPERATIVA A LA ESPECULATIVA
La edad media, con la fortaleza y riqueza de la iglesia, por un lado, y el feudalismo, por el otro, fue la época de grandes construcciones de palacios, abadías, iglesias, catedrales y, en general, de monumentales edificios. Las construcciones eran realizadas por expertos en la elaboración de la piedra que guardaban muy en secreto los conocimientos profesionales.
Hacia los finales de la edad media, con la decadencia del feudalismo y la paulatina pérdida del poder de la iglesia católica y su división, la creación del concepto de ciudades libres y los estudios académicos en las universidades que comenzaban a crearse y, más adelante, ya en la edad del renacimiento, con la decisión del rey de Inglaterra de reconstruir Londres después del incendio de 1666 que destruyó tres cuartos de la ciudad, con ladrillos en vez de piedra, material que los Masones desconocían su aplicación y trabajo, el Enciclopedismo y el Iluminismo, las Logias operativas, comenzaron a perder su fuerza y poder y para financiarse y seguir gozando de tráfico de influencia, permitieron el ingreso a sus filas a personas que no tenían ningún
Conocimiento de la profesión de albañiles o de la construcción, estos eran solo miembros de la realeza, de la banca, de las profesiones libres , del comercio y de la nobleza. Estos miembros, que no conocían y no trabajaban la piedra fueron denominados “aceptados” y con ellos se creó nueva forma y estilo de Franc-Masonería: LA ESPECULATIVA. Durante esta época de transición, cada Logia era independiente en su actuación y su forma de operar. Sin embargo, mantenían el sistema del secreto profesional con el fin de identificarse mutuamente. Seguían funcionando en recintos especiales llamados Templos o Logias, ya no en los lugares de la construcción.
Hacia los comienzos del siglo XVIII ya prácticamente no existían logias operativas. Las Logias eran especulativas y las herramientas prácticas de trabajo, ya se habían convertido en herramientas SIMBOLICAS.
PRINCIPIOS GENERALES DE LA MASONERÍA
La Masonería en el sentido simbólico, levanta un templo al perfeccionamiento moral de la humanidad. Para esta obra de fraternidad universal, admite en su seno, sin distinción de nacionalidad, raza, o creencia religiosa a todos los hombres libres y de buenas costumbres que se sientan atraídos por este ideal y estén dispuestos a servirle con rectitud de propósitos, claridad, serenidad de juicio y pureza de ideales. La Masonería no acepta en su seno a fanáticos ni sectarios de ninguna clase, sino hombres de espíritus libres y comprensivos que no olvidan nunca la tolerancia y el amor fraternal.
La Masonería proclama la existencia de un principio creador al cual llama GRAN ARQUITECTO DEL UNIVERSO, pero deja a sus miembros en absoluta libertad para darle a esta primera causa el nombre que desean y para asignarle los atributos y poderes que correspondan a la religión que profesan. Su doctrina entera se encierra en la bella inscripción “AMA A TU PRÓJIMO”. La Masonería no cree posible el progreso si no es a base de respeto a la personalidad, la justicia y la más estrecha solidaridad entre los hombres.
La Masonería, para llevar a feliz término sus ideales, impone a sus miembros el riguroso SECRETO en la labor que es tradicional auxiliar de la institución; la PRUDENCIA en el obrar, que es la garantía del acierto; la edificación por el ejemplo y el desinterés en las acciones.
Para elevar al hombre ante sus propios ojos, y hacerlo digno de su misión en la tierra, la Masonería sostiene un principio que dios ha dado al hombre como el bien más precioso: LA LIBERTAD. La libertad, patrimonio de la humanidad entera, que nadie tiene derecho a apagar ni amortiguar y que es el origen de los sentimientos de la dignidad y del honor. La Masonería exige a sus adeptos conservar, aún con sacrificio de su parte, la armonía y fraternidad que deben reinar entre los miembros de la gran familia Masónica y poner todos los medios justos y prudentes a su alcance para evitar cualquier daño a la orden Masónica o a sus semejantes. Es por ello que no admite en su seno sino a hombres de honor, probidad y entereza a toda prueba.
La aceptación de los postulados anteriores indica que has comprendido la importancia de los compromisos que puedas contraer. A la Masonería debes acercarte con la mente limpia y el corazón puro, dispuesto a recibir sus enseñanzas y a medida que progreses dentro de la orden, debes interpretar por tu propia cuenta todo lo que observas, y lo que sea difícil de entender debe ser para ti una inquietud y un reto hasta encontrar su verdadero significado, ya que en la institución todo tiene un valor especifico y preciso.
El ingreso a la masonería es un paso de suma importancia, para la institución, porque le abre sus puertas solo a “presuntos “hombres libre y de buenas costumbres. Y para el profano, pertenecer a una institución universal a la cual han pertenecido muchos gigantes de la historia, el paso debe darse después de una profunda meditación, con prudencia y sin presiones extrañas. es por ello que, desde el momento de cruzar el umbral de la LOGIA su recinto se convierte en SAGRADO .
Es por todo lo antes mencionado y, para evitarle un paso en falso y, para que en ningún tiempo futuro puedas reprocharnos que lo hayamos ENGAÑADO, es nuestro deber hablarle con franqueza antes de ser propuesto para la iniciación en nuestra Logia y llamarle la atención sobre los siguientes puntos:
1 – La Masonería es ante todo una institución organizada para fines de moralidad absoluta sobre bases humanitarias y científicas, desposeídas de toda fuerza dogmática, es decir, que la bondad o maldad, lo licito, lo moral o inmoral de los actos humanos, está en la naturaleza propia de estos actos, que la razón analiza libre de la presión y de cualquier imposición sectaria.
2 – Si piensas que en la Masonería vas a obtener ventajas en lo que se refiere a posesión civil o en lo referente a relaciones personales y de negocios que le puedan servir para realizar proyectos ambiciosos, es mejor que NO ENTRES porque en la Masonería no encontraras tales ventajas.
3 – Si no tienes la capacidad de compartir muchos momentos con personas, con intereses diferentes a los suyos, con personas de niveles sociales más altos o más bajos que el suyo, y de nivel intelectual más elevado y más bajo que el suyo, compartir con personas de pensamiento religioso o político diferentes a los suyos y llamarlos a todos QUERIDOS HERMANOS. Es mejor que NO ENRTRES, porque no vas a estar a gusto entre nosotros.
4 – Si piensas que la Masonería trabaja para destruir algún grupo social, político o religioso, es mejor que NO ENTRES.
5 – Si tu solicitud la motiva solamente la curiosidad o ampliar tu círculo social. Te equivocas, hay otras y mejores maneras de realizar tus deseos.
QUE NO ES LA MASONERÍA
Con el objeto de que no tengas una idea equivocada de lo que es la institución, debemos aclararle algunos preceptos de suma importancia.
1 – Contrario a la opinión de los profanos, la Masonería no es una institución de caridad ni agencia de empleos. Uno de los principios fundamentales de la orden es hacer el bien por el bien mismo y el Masón tiene la obligación de acudir en ayuda del necesitado. Pero puedes tener la seguridad de que en este sentido serás llamado más como contribuyente que como beneficiario.
2 – La Masonería no asegura a sus miembros contra los problemas cotidianos de la vida, no emite pólizas contra enfermedades, seguros de vida, ni paga indemnizaciones en caso de muerte de uno de sus afiliados. La Masonería no desconoce este y otros medios que tiene la sociedad para reducir el sufrimiento y las privaciones, pero limita los casos de auxilio personal a aquellas circunstancias de imperiosa necesidad.
3 – La Masonería no es una religión, tiene su filosofía propia que guarda armonía con todas las religiones, sus miembros tienen la más absoluta libertad de profesar y practicar la religión que mejor le parezca, y es por ello que al creador supremo lo llamamos GRAN ARQUITECTO DE UNIVERSO.
4 – La Masonería no está afiliada a ningún partido político, ni interviene en política, y en su seno está prohibido el debate sobre religión o política, pero lucha ahincadamente por la libertad del hombre.
5- La Masonería no es una sociedad SECRETA, sino, una sociedad PRIVADA Y DISCRETA, puesto que si fuera secreta, no tendría los símbolos que la identifican en todas las fachadas de sus templos, y sus miembros no llevarían calcomanías sobre sus automóviles y anillos que los identifican. Y PRIVADA, puesto que sus enseñanzas no son para todo el mundo, sino solo para su miembros, los que ya fueron escogidos, aceptados e iniciados en sus Augustos misterios.
QUE ES LA MASONERÍA
A la Masonería se le ha definido de muchas maneras, quizás una de las definiciones más sencillas se la han dado nuestros hermanos ingleses quienes dicen que “la masonería es un sistema moral velado en alegorías e ilustrado por medio de símbolos” la idea de enseñar por medio de alegorías y símbolos no es nueva; muchos de los grandes maestros la han empleado en mayor o menor grado.
El simbolismo alcanza un alto grado de desarrollo en la Masonería y en gran parte es la esencia de su universalidad. Los hombres de lenguas distintas pueden encontrar tropiezos para entenderse, pero el simbolismo les facilita el entendimiento sin recurrir a la palabra hablada. El simbolismo es el medio más efectivo con el cual la Masonería lucha por unir a todos los hombres. El simbolismo en la Masonería se ocupa de los valores intelectuales, morales y espirituales de la vida. Los grados Masónicos no son hechos frívolos ni ligeros. Cada paso en la carrera Masónica tiene un significado profundo.
La Masonería no es una asociación pública ni secreta, sino PRIVADA Y DISCRETA para el mutuo trato, el perfeccionamiento espiritual, la educación científica y artística y la investigación de la verdad. La Masonería proclama la paz entre los hombres como el más alto y el mas permanente de sus fines, por lo tanto, defiende el orden y respeta las leyes del país en que vive, aspira a que el mundo sea regido y gobernado por la RAZÓN. Combate la guerra, la violencia y todas las coacciones. La orden no acepta ninguna doctrina como definitiva, como exclusiva, ni como suya; estimula a sus adeptos a que las examinen todas y no limita la actuación de la conciencia ni pone muros al campo de la investigación.
La Masonería no cierra sus puertas a los católicos, protestantes, judíos, musulmanes ni a ningún militante de otras religiones, pero a todos los quiere limpios de supersticiones y tan cuidadosos, por lo menos, de lo que el hombre le debe al hombre, como igual suyo.
La Masonería excluye de sus Logias la religión, solo cuando ésta se mezcla con las cosas terrenales, se convierte en política. Pero es necesario aclarar que, entre la religión y la Masonería no existe incompatibilidad ni semejanza, porque la religión es el vínculo que une al hombre con su dios y la Masonería es el vínculo que une al hombre con su hermano el hombre.
LA MASONERÍA ES UNA RELIGIÓN O ES ANTI-RELIGIOSA
Toda Religión tiene sus dogmas de origen divino, en cambio la Masonería en sus conceptos filosóficos es contraria a este tipo de dogmas. Sin embargo, para ser Masón se requiere que el candidato crea en una fuerza superior al hombre que llamamos EL GRAN ARQUITECTO DEL UNIVERSO. De esta manera damos cabida a hermanos religiosos y no religioso por igual. A continuación, una interesante cita que expresa una concepción un poco mas deísta, mas no completamente contradictoria en relación al Gran Arquitecto Del Universo. De la declaración adoptada por la Gran Logia de Inglaterra en 1962 y ratificada en el acta de la Tenida trimestral de dicha Gran Logia del 09 de Diciembre de 1981. (Traducción del ingles) Cito:
No puede ser fuertemente aseverado que la Masonería no es una religión ni un sustituto de una religión. La Masonería tiene como meta inculcar en sus miembros estándares de conducta y comportamiento que considera aceptables a todos los credos, es más, estudiosamente se restringe intervenir en el campo del dogma o la teología. La Masonería, en consecuencia, no está en competencia con la religión, sin embargo, en la esfera de la conducta humana puede tenerse la expectativa de que sus enseñanzas sean complementarias a aquellas de la religión. Por otro lado, su básico requerimiento que cada miembro de la orden crea en un ser supremo subrayando sus obligaciones con él, debe ser suficiente evidencia para todos, excepto los pre juiciosos, la de Masonería acepta la religión, ya que requiere del hombre tener alguna concepción religiosa antes de ser admitido como Masón, y espera del que, una vez admitido, siga practicando su religión. Puesto que, la filosofía Masónica está basada en los principios de la Fraternidad y la Tolerancia.
Ahora bien, nos preguntamos que si la Masonería es anti-religiosa? De ninguna manera, al contrario, ya se ha explicado que la Masonería recibe en su seno a hermanos de todas las religiones o credos e incluso a aquellos hermanos que no creen en una divinidad más, pero aceptan la existencia de una fuerza superior al hombre que ordena la naturaleza.
Con esta filosofía, pueden compartir en armonía hermanos judíos, cristianos, musulmanes, budistas e incluso aquellos considerados ateos que aceptan la concepción del Gran Arquitecto Del Universo. Estos hermanos son ateos en el sentido de que no creen en el dios tradicional de alguna religión. El principio de Fé en la Masonería es justamente la creencia en esta fuerza superior al hombre que para algunos será dios, Cristo, Jehová, Mahoma o buda y para otros es la naturaleza. La Masonería es contraria a la manutención del ser humano en la ignorancia y por ello, en todos los tiempos, ha luchado en contra de aquellos cleros interesados en mantener al hombre en la ignorancia bajo el pretexto de que es suficiente su Fe y su creencia en dios.
Y por último, entre la Masonería y la religión, no existen semejanzas ni antagonismos. La Masonería no es una religión, ya que esta es, el lazo que une al hombre con su dios, en cualquier credo. Y la Masonería es el vínculo que une al hombre con su hermano el hombre en la tierra.
PORQUE LA IGLESIA HA CONDENADO LA MASONERÍA
En 1738, solo 15 años después de la publicación de la primera constitución de la Gran Logia de Inglaterra, el Papa clemente XII condeno a la Masonería en la bula Papal “in eminenti” fundamentalmente por ser razones publicados en la misma bula, que son :
1 – Su temor de impurificación de la iglesia católica por el hecho de que la Masonería acepta en su seno a hermanos de diferentes religiones siendo solamente la católica, según el, la verdadera y única religión aceptable.
2 – El hecho de que los Masones mantienen un secreto Masónico y en secreto lo tratado en la Logia.
3 – Los Masones juran cuando ingresan a la institución, no violar ni revelar los secretos bajo la pena de castigo moral.
4 – Y por otras razones “justas que conocemos”.
Muchos historiadores están de acuerdo que, en realidad, la verdadera razón es política. El Papa apoyaba a Carlos Eduardo, pretendiente al trono de Inglaterra, católico, refugiado en Roma y contrario al monarca reinante que era protestante. Las primeras tres razones argumentadas en la Bula ya eran conocidas en 1730 con la publicación ese año del libro anti-Masónico de Samuel Prichard “Masonería Disecada”. Si estas razones eran tan importantes para la Iglesia Católica ¿por qué esperó hasta 1738 para emitir la Bula Papal?
La razón es la ya expuesta “Política”.
Es sabido que el documento fue redactado por el Cardenal Neri Corsini, conocido hombre político por excelencia, y el Papa lo firmó realmente sin leerlo.
La siguiente es la lista de condenas Papales:
Benedicto XIV. Bula Papal “Próvidas” 1751.
Pío VII. Bula Papal “Eclesiam” 1821.
León XI. “Quo Grávida Mala” 1826. Renovada 1829.
Gregorio XVI. Encíclica “Mirari Vos” 1832.
Pío IX. Encíclica “Qui Pluribus” 1846.
“Multíplice Inter.” 1865.
León XIII. Encíclica “Humanum Genus” 1884. Una de las más violentas.
Se creía que después del Concilio Vaticano II, con un sentido de apertura de ecumenismo y mayor tolerancia, habría un cambio de actitud de la iglesia Católica hacia la Masonería. Sin embargo una declaración de Cardenal Joseph Ratzinger (actual Papa Benedicto XVI), prefecto de la congregación para la doctrina de la Fé, fechada el 25 de Noviembre de 1983. Y firmada por el mismo Papa Juan Pablo II, aclara que no ha habido ninguna modificación en la actitud de condena de la Iglesia Católica hacia la Masonería. En consecuencia, no hay duda ni equivocación de que los Masones siguen excomulgados por la Iglesia Católica.
A pesar de las condenas Papales, muchos sacerdotes católicos han pertenecido a la Masonería. José Ferrer Beni melis, Jesuita, considerado objetivo y científico historiador de la Masonería, ha tenido acceso a los archivos del Vaticano, ha constatado mas de 2ooo nombres de sacerdotes que han pertenecido al la Masonería durante la segunda mitad del siglo XVIII. Según este autor, en esa misma época, hubo Logias compuestas exclusivamente por sacerdotes católicos, por ejemplo: “la Parfaite Unión” en Rennes, “L’ Amitié a l’Emprevue” en Narbona y la “Loge theresienne” en Mons. No sólo simples curas párrocos han pertenecido a la Masonería, sino altos dignatarios como fueron el Príncipe de la iglesia de Lieja, Charles François de Velbruck. El Cardenal de Breslau en Austria fue iniciado poco tiempo después de la primera Bula Papal, y hasta un Papa del siglo XX.
LA RELACION ENTRE MASONERÍA Y POLÍTICA
La Masonería no es un partido político y prohíbe la discusión política en las Logias. El motivo fundamental de esa prohibición es la intención de velar por la armonía entre los hermanos. El político, por la naturaleza misma de su acción, intención e intereses, tiende a encerrarse en sus propias ideas y metas que le parecen justas y con facilidad, llega apasionarse con ellas.
Históricamente es conocido que hermanos Masones han desempeñado y desempeñan cargos políticos importantes en todos los tiempos y en diferentes lugares del mundo. Miranda, Bolívar, San Martín, O’Higgins, Washington y Garibaldi por mencionar solo algunos. También es conocido, que la Masonería por intermedio de sus miembros, ha tenido gran influencia en diferentes tipos de legislaciones en diferentes países, relacionadas con la libertad de pensamiento, derechos humanos, educación libre, gratuita y laica, seguro social y otros temas que son parte integral de la concepción socio-moral Masónica.
Es por ello que podemos decir que, la Masonería, tiene la expectativa de que sus miembros serán buenos y fieles ciudadanos del país en que residan, que intervengan activamente en la vida social, económica y política comportándose, fuera de los muros del Templo, aún con sus contrarios o enemigos, con tolerancia sabiendo escuchar con paciencia al prójimo manteniéndose con firmeza fieles a sus propios principios.
Y POR ULTIMO
Somos realmente HERMANOS? ¿Pertenecer a la institución Masónica nos convierte en hermanos? ¿por el hecho de ser iniciado puede pretender esto?.
NO, de ninguna manera. La concepción de hermandad no es la hermandad en el sentido fraterno-familiar. Es una idea “sui generis” que involucra en si la concepción ideológica de una unión fraternal propiamente, tal cosa, no es automática, sino como meta. A ello debemos tender y, mientras tanto, nos dirigimos el uno hacia el otro con el titulo de HERMANO diciéndole tácitamente en esa palabra “me gustaría que las relaciones entre nosotros lleguen a ser fraternales, y que tanto tú como yo hagamos todo lo posible para que así sea”. Pero la Masonería no es tan ingenua e ilógica para pretender que este asunto sea de resolución automática. Es mucho el pulimento de la piedra bruta que será requerido por cada uno de nosotros para que el concepto de hermandad y fraternidad práctico sea una realidad y, mientras tanto, podemos seguir funcionando como hombres normales, LIBRES Y DE BUENAS COSTUMBRES.